La cavidad orbitaria es una estructura ósea que se halla a cada lado de las fosas nasales (nariz) está compuesta por el globo ocular, el nervio óptico, los músculos extraoculares, arterias, venas, nervios sensitivos, nervios motores, nervios autonómicos, y grasa intra y extraconal.
De una manera menos científica y más clara la órbita es la cavidad (o casita) donde vive el ojo. Es un lugar de asiento de muchas patologías que requieren de una buena evaluación y tratamiento posterior.
Muchas veces este tratamiento es quirúrgico. Dentro de las patologías más frecuentes podemos encontrar tumores, inflamaciones agudas o crónicas, traumatismos.
Casos:
La tendencia actual es realizar biopsia quirúrgica de la lesión que de ser pequeña o fácilmente extraíble se hará por completo.
Si esto no es así se hará una biopsia incisional (un pedacito nada mas) para realizar un estudio anatomopatologico y posteriormente el tratamiento adecuado a cada caso.
El traumatismo orbitario puede comprometer el piso o alguna de las paredes orbitarias.
Estos raumatismos pueden ocasionar visión doble, un ojo más bajo (hipoglobo) que el otro, alteración de los movimientos oculares o un ojo mas hundido (enoftalmos) que el otro. En estos casos usamos materiales que nos ayudaran a reconstruir dicha fractura y resolver tanto la sintomatología como la estética.